viernes, 20 de abril de 2012

Y el Señor dice: Clama a mí, que yo te responderé y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces"

Jeremías 33:3

Palabra de Dios



Santiago 5:13
“¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas.”

La vida tiene ambas cosas, tanto momentos tristes como momentos felices (ver también Eclesiastés 3:1,4). La Palabra dice que oremos en tiempos de aflicción y que cantemos alabanzas al Señor en tiempos de alegría. Me quedé impresionado recientemente cuando descubrí cuánto habla la Biblia sobre alabar y cantar alabanzas a Dios. De hecho, habla un libro de la Biblia entero – uno de los más largos y queridos – que se llama Salmos y el cual yo traduciría como Cantos a Dios. Ahora me gustaría echarle un vistazo a alabar y cantar, y a algunas referencias de la Palabra al respecto.

Alabando en el Antiguo Testamento

En el Nuevo Testamento viene tanto sobre alabar y cantar a Dios que es difícil decidir por dónde empezar. La primera aparición de la palabra “alabar” está en Génesis 29:35, en el nacimiento de Judas, de la tribu de la cual viene el Señor. Ahí dice:

Génesis 29:35
“Concibió [Lea] otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré a Jehová; por esto llamó su nombre Judá; y dejó de dar a luz.”

Aparte de esta, hay 260 apariciones más de la palabra “alabar” y como 180 de la palabra “cantar”.
Yendo a algunas de estas apariciones vemos por ejemplo que una de las tareas que los levitas tenían asignadas era alabar a Dios. De hecho, una parte de ellos tenía asignada solo esta tarea:

1 de Crónicas 23:3-6
“fueron contados los levitas de treinta años arriba; y fue el número de ellos por sus cabezas, contados uno por uno, treinta y ocho mil. De éstos, veinticuatro mil para dirigir la obra de la casa de Jehová, y seis mil para gobernadores y jueces. Además, cuatro mil porteros, y cuatro mil para alabar a Jehová, dijo David, con los instrumentos que he hecho para tributar alabanzas.

Y también en 1 de Crónicas 16:4-6
“Y puso delante del arca de Jehová ministros de los levitas, para que recordasen y confesasen y loasen a Jehová Dios de Israel: Asaf el primero; el segundo después de él, Zacarías; Jeiel, Semiramot, Jehiel, Matatías, Eliab, Benaía, Obed-edom y Jeiel, con sus instrumentos de salterios y arpas; pero Asaf sonaba los címbalos. También los sacerdotes Benaía y Jahaziel sonaban continuamente las trompetas delante del arca del pacto de Dios.”

Conforme vayamos avanzando, en el libro de Salmos vamos a encontrar muchos pasajes que se refieren a alabar y a cantar a Dios. La lista es larga, así que tengo que restringirme a solo algunas de las referencias:

Salmos 21:13
“Engrandécete, oh Jehová, en tu poder; Cantaremos y alabaremos tu poderío.

Salmos 22:23
Los que teméis a Jehová, alabadle


Salmos 28:7
“Jehová es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fui ayudado, Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré.”

Salmos 30:4
Cantad a Jehová, vosotros sus santos, Y celebrad la memoria de su santidad.”

Salmos 33:2
Aclamad a Jehová con arpa; Cantadle con salterio y decacordio.”

Salmos 50:23
El que sacrifica alabanza me honrará;

Salmos 57:9
Te alabaré entre los pueblos, oh Señor; Cantaré de ti entre las naciones.

Salmos 63:3
“Porque mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán.”

Salmos 63:5
“Como de meollo y de grosura será saciada mi alma, Y con labios de júbilo te alabará mi boca

Salmos 67:3
Te alaben los pueblos, oh Dios; Todos los pueblos te alaben.


Salmos 68:4
Cantad a Dios, cantad salmos a su nombre; Exaltad al que cabalga sobre los cielos. JAH es su nombre; alegraos delante de él.”

Salmos 86:12
Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, Y glorificaré tu nombre para siempre.

Salmos 106:1
Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

Salmos 118:28
Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré.

Salmos 117:21
Alabad a Jehová, naciones todas; Pueblos todos, alabadle

Salmos 139:14
“Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien.”

Salmos 147:1
Alabad a JAH, Porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios; Porque suave y hermosa es la alabanza.”

Salmos 150
Alabad a Dios en su santuario; Alabadle en la magnificencia de su firmamento.Alabadle por sus proezas; Alabadle conforme a la muchedumbre de su grandeza.Alabadle a son de bocina; Alabadle con salterio y arpa. Alabadle con pandero y danza; Alabadle con cuerdas y flautas. Alabadle con címbalos resonantes; Alabadlecon címbalos de júbilo. Todo lo que respira alabe a JAH.”

Jeremías 20:13
Cantad a Jehová, load a Jehová; porque ha librado el alma del pobre de mano de los malignos.”

Como dije, esta es solo una selección de pasajes sobre alabar al Señor y cantarle. Hay muchísimos más. El Salmo 148 por ejemplo, registra toda la creación en forma de alabanza:

Salmos 148
“Alabad a Jehová desde los cielos; Alabadle en las alturas. Alabadle, vosotros todos sus ángeles; Alabadle, vosotros todos sus ejércitos. Alabadle, sol y luna; Alabadle, vosotras todas, lucientes estrellas. Alabadle, cielos de los cielos, Y las aguas que están sobre los cielos. Alaben el nombre de Jehová; Porque él mandó, y fueron creados. Los hizo ser eternamente y para siempre; Les puso ley que no será quebrantada. Alabad a Jehová desde la tierra, Los monstruos marinos y todos los abismos; El fuego y el granizo, la nieve y el vapor, El viento de tempestad que ejecuta su palabra; Los montes y todos los collados, El árbol de fruto y todos los cedros; La bestia y todo animal, Reptiles y volátiles; Los reyes de la tierra y todos los pueblos, Los príncipes y todos los jueces de la tierra; Los jóvenes y también las doncellas, Los ancianos y los niños. Alaben el nombre de Jehová, Porque sólo su nombre es enaltecido. Su gloria es sobre tierra y cielos. El ha exaltado el poderío de su pueblo; Alábenle todos sus santos, los hijos de Israel, El pueblo a él cercano. Aleluya.”


Como en Isaías 43:19-21 el Señor dice:
“He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad. Las fieras del campo me honrarán, los chacales y los pollos del avestruz; porque daré aguas en el desierto, ríos en la soledad, para que beba mi pueblo, mi escogido. Este pueblo he creado para mí; mis alabanzas publicará.”

Los hombres y los ángeles, el sol y la luna, la tierra y las estrellas, toda la creación, alabe al Señor. “Porque Él ordenó y fueron creados.” NINGUNO DE NOSOTROS NO ESTARÍA AQUÍ AHORA SI Dios no lo hubiera ordenado. Todo eso lo vemos a nuestro alrededor, el sol, la luna, las estrellas y la naturaleza, porque Dios lo ordenó y fueron creados. Sí, declararemos Su alabanza. Sí, alabaremos a nuestro Creador. Como el Salmo 150 dice: “Todo lo que respira, alabe al Señor. ¡Aleluya!”

Alabando en el Nuevo Testamento
Cantar y alabar no son temas exclusivos del Antiguo Testamento. De hecho, en el Nuevo Testamento, con la llegada del espíritu santo, se agregó una manera más de alabar al Señor: el canto en el espíritu. En 1 de Corintios 14 dice:

1 de Corintios 14:14-17
“Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto. ¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento. Porque si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa lugar de simple oyente, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho. Porque tú, a la verdad, bien das gracias; pero el otro no es edificado”

Además de cantar con el entendimiento, también está el cantar en el espíritu, lo cual es el hablar en lenguas. Ya sé que hoy en día hay un debate muy grande en la iglesia en cuanto al hablar en lenguas y las manifestaciones del espíritu santo en general. NO quiero iniciar ese debate aquí. Si tú crees que Jesucristo es el Señor y que Dios lo levantó de los muertos entonces eres mi hermano si hablas en lenguas o no. Lo que quiero aquí es honestamente declarar lo que veo que la Palabra de Dios dice. Y lo que veo es que puedo cantar con mi entendimiento y también puedo cantar en el espíritu, a través del hablar en lenguas.
Más adelante en nuestro tema, Colosenses y Efesios dicen:
 Colosenses 3:16
“La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.”

También Efesios 5:18-19
“No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;”

Los Salmos e himnos pueden ser un tipo de enseñanza y amonestación de uno para con el otro y la instrucción de la Palabra es cantar y tocar música en nuestros corazones para Él. Jesús y sus discípulos cantaban himnos en sus reuniones. Esto lo vemos en Mateo 26:30:
 Mateo 26:30
“Y cuando hubieron cantado el himno, salieron al monte de los Olivos.”

Cantar y alabar al Señor no son una actividad del pasado. Sino que son una actividad para todas las épocas, para toda la creación y nunca cesará. “Todo lo que respira alabe al Señor. ¡Aleluya!”


  
“Todo lo que respira alabe al Señor. Aleluya (Salmo 150).